viernes, 16 de diciembre de 2005

SUANCES-SANTILLANA DEL MAR-COMILLAS

SUANCES

Aunque nosotros nos dirigimos directamente a ver los acantilados y sus vistas, el municipio de Suances alberga pequeños tesoros entre los que destaca: Casa de los Polanco, el barrio de La Cuba aún conserva parte de su tipismo y Casa palacio de Fernando Velarde en Hinojo.

Sus calas rocosas y sus extensos arenales son algunos de los atractivos del municipio. Elegidas por los practicantes de los deportes náuticos como el surf, y por quienes buscan el sosiego de una naturaleza aún inalterable, todas tiene su peculiar encanto. La Tablía una pequeña cala, La Concha, una playa amplia dentro del entorno más urbano.
Playa de La Concha
La playa de el Sable, un arenal de fina arena dorada, La Riveruca, una sosegada playa o la playa de los Locos, que mide unos 500 m, está encajonada entre acantilados de piedra.
Playa de Los Locos
Hay que destacar también La Punta del Dichoso que se adentra en el mar formando una península en el apéndice occidental de la ría de San Martín de la Arena.
Punta del Dichoso
Es conocida por los lugareños como La Roca Blanca, y su privilegiada situación la hace dueña de unas vistas espectaculares. Se adentra en el mar en una zona de profundos acantilados que se suceden en la costa que la circunda.
Acantilados de la Punta del Dichoso
Aquí también podemos observar el Faro y junto al él existen restos de la construcción que en su día albergaba las defensas costeras de El Torco, s.XVII.
Faro
Si miramos al Este podemos divisar las Islas Segunda y Los Conejos frente a la Punta del Cuerno.
Punta del Cuerno frente islas Segunda y los Conejos
En los alrededores se han habilitado senderos que nos acercan al borde de los acantilados, desde los que se puede disfrutar de la calma de un mar a ratos salvaje y embravecido. Es entonces cuando la vista desde la Punta del Dichoso adquiere una mayor belleza.
Vista desde la Punta del Dichoso

SANTILLANA DEL MAR

Fue declarado por votación popular el pueblo más hermoso de España. Se trata de un conjunto monumental único que se ha conservado invariable al paso del tiempo desde la Edad Media.
Santillana del Mar
Su historia se remonta a una ermita construida en el siglo VIII, entorno al cual se fue erigiendo la villa a lo largo de los siglos. Del esplendor económico que vivió la villa, sobre todo durante los siglos XVII y XVIII, dan cuenta la riqueza de sus casonas y palacios, la mayoría con escudos.
Palacio de los Velarde
Mencionar varios museos como el Jesús Otero, La Inquisición o el Museo Diocesano con importantes obras religiosas de toda Cantabria.
Museo de la Tortura
El conjunto histórico-artístico no se puede visitar más que a pie. La villa se abre camino hacia el norte a través de una única vía, la calle de Santo Domingo, que pronto se bifurca en forma de "Y" en la de Juan Infante, que conduce a la plaza de Ramón Pelayo; y la que tomando diversos nombres (Carrera, Cantón y del Río) se dirige hasta la Colegiata.
Calle de Santo Domingo
En la plaza de, traza triangular, se ubican algunos de los edificios más representativos: la casona de los Barreda-Bracho del siglo XVIII hoy parador de Gil Blas. Las casas del Águila y la Parra, el Ayuntamiento, la Torre de Don Borja y la Torre de Merino que es el edifico más antiguo.
La Carpintería de Santillana del Mar
En la calle del Cantón, por su parte, presenta un maravilloso conjunto de casonas entre las que destacan: la casa gótica (s.XV) de Leonor de la Vega y la de los Villa.
Calle Canton
Al final de la calle se ubica la Colegiata, el monumento religioso más importante del románico en Cantabria. Levantada sobre una antigua ermita en el siglo XVII, tiene planta de tres ábsides, crucero y tres naves. El claustro adosado a la nave norte, está considerado como la obra maestra del conjunto, por la excelente talla y decoración de sus capiteles.
La Colegiata
Como obligado es llegar hasta el Museo de las Cuevas de Altamira para valorar la importancia del descubrimiento de la llamada Capilla Sixtina del Arte Cuaternario.
Museo de Altamira

COMILLAS

Apenas hemos recorrido 20 km. desde Santillana y ya accedemos a otro de los puntos claves de nuestro viaje: La noble y aristocrática villa de Comillas. Es la otra localidad de la costa occidental que merecidamente está reconocida como conjunto histórico-artístico.
Vista de la Universidad desde el Palacio Sobrellano
La villa, es conocida con el apelativo de "Villa de los Arzobispos", dado que en su municipio nacieron cinco prelados que durante la Edad Media ocuparon varias diócesis. Sus calles empedradas, y sus plazas, invitan a descubrir cada rincón, reportando al visitante una sensación de paz y serenidad.
Iglesia Parroquial de San Cristóbal
En pleno casco urbano se encuentra La Plaza, rodeada de casonas con amplios miradores, junto al Ayuntamiento, y la iglesia parroquial de San Cristóbal, cuya construcción data del siglo XVII.

La Plaza
El Conjunto de Sobrellano está formado por el Palacio de Sobrellano y la Capilla-Panteón.
Conjunto Sobrellano
El primer edificio de este conjunto que se construyó fue la Capilla-Panteón, no sabiendo si pudo ser a finales de 1880 o principios de 1881. Es una catedral a pequeña escala de una sola nava rematada por la cabecera poligonal con girola y de estilo gótico centroeuropeo.
Se caracteriza por los bellos mausoleos de mármol que albergan a la familia, el templo no sólo tiene esta función, también se celebran oficios en el interior.
Capilla-Panteón
El Palacio de Sobrellano es un grandioso edificio llamado también Palacio de Marqués de Comillas, dado que fue construido en el mismo lugar donde se ubica su casa. Fue declarado Bien de Interés Cultural en 2002.

Palacio de Sobrellano
El Palacio se comenzó en 1882 y se construyó como residencia de verano del Marqués y de la Familia, aunque se inauguró en 1888, después de su muerte.
El estilo neogótico de la construcción, recoge varias tendencias, el gótico civil inglés, lo palacios venecianos o los relieves similares a los mozárabes musulmanes.
Puerta lateral del Palacio de Sobrellano
La fachada principal posee una generosa ornamentación, siendo la zaguera más contenida.
Fachada principal del Palacio de Sobrellano
La Universidad Pontificia es un impresionante edificio que domina todo el pueblo desde poniente, es uno de los más representativos de la villa. Los detalles ornamentales, así como la portada de acceso al recinto fueron obra el arquitecto Doménesch.
Universidad Pontificia de Comillas
El "Capricho" de Gaudí, data del siglo XIX, entre 1883 y 1885. Es un hermoso edificio que mezcla elementos arabescos (azulejos, ladrillo visto...) con neogótico y formas arborescentes. Destaca una torre cilíndrica que está decorada con cerámica que representa girasoles.
El Capricho de Gaudí
También son importantes sus vidrieras, en las que aparece la referencia a la música y la naturaleza (animales tocando diferentes instrumentos). En cuanto a la ornamentación, decora con hierro en un intento de romper moldes.
El Capricho de Gaudí
Fue declarado monumento histórico-artístico en 1969. En 1985, se convirtió en restaurante, pero cerró sus puertas en 2009.
El Capricho de Gaudí
En el Cementerio, es rematado por la magnífica obra escultórica de El Ángel Exterminador de Joseph Llimona, dominando las ruinas del viejo monasterio gótico, representa uno de los más bellos detalles del paisaje de Comillas.
El Ángel Exterminador en Comillas
ALOJAMIENTO

Nuestro alojamiento durante todo el viaje a Cantabria, fue en una casa rural, con un trato fantástico de los dueños. La casa preciosa, cómoda y de calidad. En todo momento nos ayudaron y aconsejaron que aquellas visitas importantes a realizar.
Posada Lunada
Calle El Alto 49 Barcena de Cudón.
Fachada de la Posada Lunada







jueves, 15 de diciembre de 2005

CASTRO URDIALES-SANTOÑA-NOJA

CASTRO URDIALES

Es el encanto de un pueblo pesquero, de tradición ilustre y señorial de ambiente turístico. Cuenta con diversas playas: la de Urdiales, la del Fraile y la de Brazomar, que destaca por su aire cosmopolita.
Castro Urdiales
El antiguo Puerto Pesquero se encuentra cerca del casco viejo, protegido por el promontorio donde están situados la Iglesia de Santa María y el Castillo-Faro.
Antiguo Puerto de Castro Urdiales
Su patrimonio monumental está formado por la Iglesia de Santa Maria de la Asunción, la mejor obra gótica de Cantabria, construida entre los siglos XIII y XV.
Iglesia de Santa María de la Asunción
Las características propias de su estilo gótico son amplias naves, elevadas bóvedas, arbotantes y contrafuertes que soportan el peso del edificio.
Iglesia de Santa María de Asunción
Se dice que está enferma, porque padece "el mal de la piedra", nombre que se le da a una serie de patologías por las cuales se producen unas reacciones químicas que transforman la piedra en arena.
Iglesia de Santa María de Asunción
Fue declarada Bien de Interés Cultural en el año 1931.
Iglesia de Santa María de la Asunción
Se conserva el castillo medieval faro, situado en un extremo del promontorio dominando el acceso marítimo y protegiendo la población.
Castillo-Faro
Se levantó esta sólida fortaleza de planta pentagonal y elevados muros reforzados en sus esquinas por cubos circulares.
Castillo-Faro
Desde el castillo-faro se desciende al puerto cruzando el Puente Viejo de Santa Ana, popularmente llamado romano, pero de traza medieval.
Puente Viejo
La ermita Santa Ana, es un pequeño recinto elevado sobre un peñón que domina el puerto y a la que hoy se puede acceder subiendo por unas escalerillas.
Ermita Santa Ana (izquierda), Iglesia Santa María (centro) y el Castillo - Faro (derecha)
Desde la ermita tiene su inicio el Rompeolas que protege el puerto de Castro, siendo muy recomendable un paseo hasta su extremo.

Rompeolas
Al final del Rompeolas podemos encontrar otro pequeño Faro.
Faro al final del Rompeolas
SANTOÑA

Es una villa pesquera enclavada al pie del emblemático Monte Buciero. Se haya casi completamente rodeada por el mar. Conserva monumentos interesantes como la Iglesia de Santa María del Puerto o el Palacio del Duque, la casa-palacio de Isla o Chiloeches, la Casona de Castañeda...
Cofradía de Pescadores
Al final del pasaje marítimo y subiendo por unas escaleras podemos comenzar una ruta en torno al monte Buciero. En este recorrido, además de disfrutar de la belleza natural del lugar, podremos ver dos faros y tres antiguos fuertes que tuvieron gran actividad en tiempos pasados defendiendo la bahía de Santoña, dada la posición estratégica de la villa.
Playa de Santoña y al fondo el Monte Buciero
Nada más ascender por estas escaleras tenemos el Fuerte de San Martín, perfectamente conservado y que se puede visitar. Parece ser la única fortificación del Sistema Carnot que ahora existe en el mundo y fue construido en tiempos de Felipe II. Se declaró Monumento Histórico.
Fuerte San Martín
Fue la segunda barrera de fuego, en la falda del Buciero. Construido en forma de uve, con dos pisos superpuestos que se comunicaban por una escalera de caracol interior. Se conserva todavía un edificio exento que se conoce como casa de oficiales.
Fuerte San Martín
El fuerte está construido con grandes sillares de piedra arenisca por el frente sur y de caliza por el frente oeste. Actualmente es propiedad del Ayuntamiento de Santoña. Está reconstruido y rehabilitado para el Centro Cultural y para seda de la Escuela-Taller de rehabilitación del Patrimonio.
Fuerte San Martín
Más adelante podemos encontrarnos con una escultura de la Virgen del Puerto. La gran imagen fue inaugurada en diciembre 1996. El lugar donde se encuentra se convierte en un maravilloso mirador de la bahía de Santoña.
Escultura de la Virgen del Puerto
Tomando un desvío a la derecha, encontramos el Fuerte de San Carlos, construido en 1668 a raíz del saqueo de Santoña por el arzobispo de Burdeos. Nos ofrece magníficas vistas de la bahía. Declarado monumento histórico.
Fuerte San Carlos
Está situado en la falda del monte y suponía la primera barrera para la entrada a la bahía. Su estructura está situada en dos niveles.
Fuerte San Carlos
La parte de abajo está construida con sillares de piedra caliza. Tiene una galería corrida, en forma de ele, con vanos abocinados especialmente pensados para las armas de artillería. Sobre esta parte hay una terraza muy amplia donde se encontraban los cañones. En el nivel superior se conservan todavía algunos edificios rectangulares utilizados para vivienda, uno de ellos probablemente era un polvorín.
Fuerte San Carlos
Nosotros por motivos personales no pudimos seguir la ruta, pero os indicamos igualmente como seguir, según la información que teníamos.
Vistas desde el Fuerte San Carlos
Volviendo al camino principal, continuamos por una pista forestal que va rodeando el Monte Buciero. Destacar un desvío por el que tras descender una escalera de 760 peldaños llegamos al Faro del Caballo, al pie de un impresionante acantilado. El siguiente punto en la ruta es el Faro del Pescador, tranquilo rincón al que llega una carretera por la que debemos seguir para ver, poco después, la playa de Berria.
Vistas desde el Fuerte San Martín
El final del recorrido pasa junto al Fuerte de Napoleón, también llamado fuerte del Mazo. Es quizás el que menos interés tiene porque desde el exterior solo se aprecia la puerta de entrada y el muro que rodea el recinto. Es el más moderno de todos, datando ya, de principios del siglo XIX. En cualquier caso, merece la pena detenerse para admirar las vistas de Santoña durante el camino que acaba regresando a Santoña por el mismo lugar por el que comenzamos el recorrido.

VILLA DE NOJA

Situado en la comarca de Trasmiera. En 1644 recibió de Felipe Iv el título de villa, lo que le permitió ser independiente de dicha junta. Destacar sus playas

La playa de Trengandín o "playa grande", tiene una extensión superior a 6 km. Podemos decir con propiedad que es una de las más largas y tranquilas de Cantabria. Silenciosa e íntima, con su fina y dorada arena bañada por cristalinas aguas.
Playa de Trengandin
Con bandera azul de la Comunidad Europea y una arena especialmente dorada y fina, la playa de Rís tiene un extensión de 2 km.
Playa Rís
Frente a Rís, como protegiendo la playa, se encuentra la isla de San Pedruco, a la que es posible acceder en la bajamar. Habitada por millares de gaviotas, conserva en sus entrañas los restos de la pequeña ermita medieval de San Pedruco, una de las primeras y más primitivas que se construyeron en Noja.
Isla de San Pedruco, vista desde la Playa Rís
También visitamos la Iglesia parroquial de San Pedro, situada en la plaza de la Villa, y está dedicada a San Emeterio y San Celedonio. Construida sobre los restos de un antiguo monasterio, la edificación actual data de principios del siglo XVI.
Iglesia parroquial de San Pedro