jueves, 8 de octubre de 2009

LAS MÉDULAS


Ruta en las Médulas
Es un entorno paisajístico formado por una antigua explotación minera romana de oro situada en las inmediaciones de la localidad homónima, en la comarca del Bierzo, provincia de León.


Las Médulas
El trabajo de ingeniería realizado por la extracción del mineral supuso la alteración del medio ambiente pero también dio como resultado un paisaje de arenas rojizas, cubierto actualmente de vegetación de castaños y robles. Se considera un "paisaje cultural" y tiene la denominación de "Parque Cultural".
Las Médulas
Actualmente, en la fauna de la zona destacan el jabalí, el corzo, el gato montés, etc.
....Y alguna oveja
En la Senda de las Valiñas nos encontramos a "La Cuevona" y "La Encantada"
Senda de las Valiñas
"LA CUEVONA"

Es uno de los lugares que más impresiona y marca a los visitantes, y es por ser la galería de mayor altura de todas las existentes.
La Cuevona
"LA ENCANTADA"

Se accede tras haber pasado por delante de la Cuevona, subiendo una pequeña cuesta que se halla protegida por una barandilla de madera. Es una de las galerías más singulares dado que nos sorprende por su luminosidad que se produce por la entrada de luz desde un gran agujero en la parte superior.
La Encantada
Tras superar un pequeño pero incómodo y polvoriento desnivel, llegamos a un punto en que se aprecia dos túneles que se bifurcan a izquierda y derecha, además de observar una hendidura en la que se aprecian restos de otra gran galería.
La Encantada
Al finalizar éstas galerías podemos observar, en especial desde la de la izquierda un hermoso paisaje.
Galería que se accede desde La Encantada

"MIRADOR DE ORELLÁN"

Desde aquí se tiene una de las vistas más impresionantes y populares de la Zona Arqueológica.
Vista desde el Mirador
Al volvernos, desde el Mirador, podemos ver, a lo lejos el Pueblo de Voces y por encima el Pico Ferradillo, el más alto de la zona, con 1345 metros de altitud.
Vista posterior del Mirador








HERRERIA DE COMPLUDO-PEÑALBA DE SANTIAGO

LA HERRERIA DE COMPLUDO

El acceso a la construcción que alberga este insólito ejemplo de artesanía industrial se produce a través de un sendero que hay que recorrer a pie, entre cursos de agua y espesa vegetación, en un lugar próximo al encuentro de los arroyos Miera y Miruelos.
Este cartel te lo encuentras al principio del sendero
El recóndito emplazamiento no hace sino acentuar el halo de misterio existente acerca de los orígenes de la herrería. Se han venido asociando los comienzos de esta curiosa industria popular a los orígenes del monasterio de Compludo, fundado por el famoso santo durante la VII centuria.
Sendero hacia la Herrería
Refiriéndose a la rueda motriz, se detalla que es la forma de aprovechamiento de energía hidráulica más primitiva y rudimentaria que se conoce a través de la historia, empleada para industrias antiguas desde el Medievo y conocida incluso por los ingenieros helenísticos y por Vitrubio posteriormente.
Rueda Motriz
También se apunta que el sistema hidráulico para la inyección de aire en el hogar es coincidente con el utilizado en las "forjas catalanas" que según Karsten pudo ser un procedimiento introducido en España por los romanos en el primer siglo de nuestra era. Estas hipótesis parecen venirse abajo por los últimos estudios realizados, ya que se apoyan de falta de referencias documentales y lo sitúan a la Herrería en el S. XIX.
Herreria
Cimienta su originalidad en el ingeniosos y rudimentario sistema de aprovechamiento hidráulico. La mampostería canaliza las aguas fluviales paralelamente al espacio donde se realiza la actividad.
Canalización
Por otro lado la fuerza del agua provoca una corriente de aire por efecto Venturi en la trompa, avivando el fuego de la fragua. Por otro lado, aguas abajo del canal, un rodezno de aspas impulsadas por el agua gira alrededor de un eje de levas conjuntamente con una gran viga de nogal con fuerte y poderoso dentado en su extremo.
Canal del agua
Esta viga hace palanca para el largo martillo pilón que golpea rítmicamente sobre el yunque donde se trabaja el material, todo ello a la velocidad deseada según la regulación del caudal de las aguas.También se utilizan para lubricar y refrigerar el mecanismo impulsor.
Martillo
VALLE DEL SILENCIO

Situado al sureste de la comarca de El Bierzo, a unos 23 km de Ponferrada. Forma parte de la cuenca del Río Oza, conocida como Valle del Oza o Valdueza. Se encuentra en la cara norte de los Montes Aquilanos.
El Valle del Silencio
Lo descubrieron los monjes visigóticos que poblaron este valle, sabiendo que era todo un lugar en el que poder encontrar la auténtica paz espiritual. De hecho, paseando por el valle entenderemos por qué eligieron éste lugar para llevar una vida de retiro y meditación.
El Valle del Silencio

PEÑALBA DE SANTIAGO 

Es una pequeña, bella y recóndita aldea berciana que conserva los caracteres del medioevo. Las nuevas construcciones respetan la tradición arquitectónica y pasear por sus empinadas y angostas calles, con casas de mampostería de pizarra. Por su arquitectura rural y por ser el único ejemplar de arquitectura popular berciana, ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico Nacional.
Casa
Está situada en un agreste anfiteatro de montañas, en un paraje remoto en la cabecera del río Oza. Este paisaje impresionante de alta montaña del valle del Silencio y a 22 km de Ponferrada, fue declarado Paraje Pintoresco en 1969.
El acceso se efectúa por una carretera de montaña de trazado tortuoso y angosto al discurrir entre los montes Aquilanos y valles como los del Silencio y Friguera.
El Bar donde comimos estupéndamente
Situada en el centro del pueblo la iglesia de Peñalba, apenas sobresale del resto de las techumbre de las casas colindantes, la aísla de las casas que la rodean, creando pasos libres estrechos que impiden la visión general del monumento. Era un monasterio, fundado por San Genadio en el siglo X. De él queda únicamente la iglesia, terminada de construir en el 937 por el abad Salomón. Se trata de un templo humilde en su apariencia externa y que es una auténtica joya del mozárabe español.
Exterior de la Iglesia
En el muro sur, nos encontramos la más perfecta puerta del arte mozárabe. Bajo un arco de descarga, se cobijan dos arcos geminados de herradura que apean en tres columnas de mármol de basa áticas. Las dovelas de los arcos están perfectamente talladas y se trasdosan con una triple moldura.

Puerta mozáraba
En la fachada norte una sencilla puerta de herradura en la que en la jamba izquierda se halla una inscripción funeraria latina, en versos leoninos.
Puerta de Herradura
En los muros exteriores nos encontramos con otras inscripciones, deterioradas y prácticamente ilegibles, que hacen referencia a los lugares de enterramiento de otros personajes, principalmente monjes y abades. El espacio que rodea al templo fue utilizado a lo largo del tiempo como cementerio.
Muro Exterior
En el mismo muro y adosado al contraábside se halla un bello sepulcro románico, que pudo ser erigido en la segunda mitad del S. XII, con piezas probablemente reutilizadas. La tradición oral afirma que es San Fortis, discípulo y sucesor de San Genadio en la silla episcopal de Astorga, el abad aquí enterrado.
Sepulcro románico
Hay que destacar los restos de "pintura mural" decorativa que se conservan en el interior, ocultos durante años por los revocos aplicados.

IMPORTANTE MENCIONAR:
MOLINASECA
Molinaseca, es un pueblo muy importante en el Camino de Santiago en León, a 6 km. de Ponferrada. Está vinculada al Puente de los Peregrinos, una construcción de planta románica que se eleva sobre el río Meruelo.
Puente Románico y Parroquia San Nicolas de Bari
El pueblo comienza una vez cruzamos el puente, cuya parte histórica concluye a los pies del viejo crucero de piedra. Hay muchísimas casas de piedra, todo en conjunto aún tiene un gran aspecto medieval. Declarada Conjunto Histórico (Bien de Interés Cultural).
Calle de Molinaseca

El Santuario de Nuestra Señora de las Angustias es uno de los puntos más importantes de la ruta del Camino de Santiago. El templo ya existía en el siglo XI, aunque tuvo que ser reconstruido en 1512 tras ser destruido el anterior por un incendio. Su aspecto actual data del año 1705.
Nuestra Señora de las Angustias
ACEBO

Es un pintoresco pueblo, enclavado al pie del mismísimo Camino de Santiago. Ha sabido conservar su interesante conjunto de arquitectura popular berciana. Las escaleras exteriores, las solanas de madera y los tejados de pizarra con sus principales y definitorios elementos.
Casa de Acebo
El Camino de Santiago pasa por el centro del propio pueblo, por la llamada calle Real, con sus típicas casas serranas de corredores.

Calle Real del Acebo

MANJARIN

Situado junto al monte Irago. A mediados del siglo XX, como muchos pueblos de montaña, quedó despoblado, hasta que en 1993 un ermitaño, al que recientemente se le ha sumado otro, retomaron la labor de "hospitaleros" del Camino de Santiago, continuando su actividad.
Manjarin

CASTILLO DE PONFERRADA

Castillo de los Templarios/Castillo Temple


Situación
El castillo de Ponferrada se encuentra situado en una colina que domina el río Sil desde sus 60 metros de altura, al borde de una meseta, en el municipio de Ponferrada, provincia de León. Ocupa una extensión de 8.000 metros cuadrados. Se encuentra en el cruce del Camino de Santiago entre León y Villafranca.
Castillo de Ponferrada
Historia
El castillo de Ponferrada fue originariamente un castro prerromano y después una ciudadela romana que asolada en el siglo IX, fue desde el XI reconstruida y fortificada.

En el siglo XII, los reyes de León donaron Ponferrada a la Orden del Temple con la misión de socorrer a los peregrinos que pasaran por este territorio. El castillo comenzó a construirse en el siglo XI, y perteneció a los Templarios hasta que, en 1312, se disolvió la orden y pasó a la Corona de León. En 1486 era propiedad de los Reyes Católicos. Durante la ocupación francesa de 1811, se encontraba en perfectas condiciones. En uno de sus salones, los oficiales del Regimiento de Monterrey ofrecieron un fabuloso baile en honor a las damas de la ciudad de Ponferrada. Posteriormente, fue mandado destruir para evitar que cayera en manos francesas.

El castillo que hoy conocemos es el resultado de una larga serie de ampliaciones, reformas y añadidos que van desde la primera cerca de la planta cuadrada de principios del siglo XII, hasta las últimas zonas construidas a finales del siglo XV y principios del XVI. Posteriores incorporaciones y las numerosas reformas llevadas a cabo desde principios del siglo XX, han contribuido a la complejidad del conjunto, tal y como lo conocemos hoy en día. Los escudos y blasones de quienes lo ocuparon y contribuyeron en su construcción son prueba de sus diferentes etapas.


Primer periodo, finales del siglo XII y principios del XIII:
Cuando en 1178 Ponferrada pasa a depender de la Orden del Temple, por donación de los reyes leoneses, los templarios encuentran una pequeña fortaleza que fue en su origen castro y posteriormente 
ciudadela romana. Aunque el origen del castillo se sitúa ante del siglo XII, es en esta etapa cuando se refuerza y reedifica el recinto amurallado, con fábrica de cal y canto, para proteger y custodiar a los peregrinos del Camino de Santiago y defender la entrada a la zona noroeste de la península.

Segundo periodo, siglos XIII y XIV:
Disuelta la Orden del Temple, su maestre hará entrega de la fortaleza y villa al rey Fernando IV, que a su vez lo donará a su mayordomo, Pedro Fernández de Castro, Señor de Lemos y Sarria, que comenzaría a levantar la parte denominada Castillo Viejo, en la esquina norte de la cerca.

Tercer periodo, segunda mitad del siglo XV:
Durante este periodo fueron múltiples los acontecimientos que hicieron que el castillo retornara a la Corona y posteriormente a los Osorio-Castro. Época de grandes reformas, debidas a necesidades defensivas, llevaron a construir las Torres de Monclín, Cabrera, Malpica, la de la entrada y la de los Caracoles, la Barbacana, el puente levadizo, la zona palaciega, la torre de Malvecino y el Cubo Nuevo.

Cuarto periodo, finales del siglo XV y principios del XVI:
Tiempo durante el cual se fortalecerá la torre de Malvecino y se construirá la de Juan Torres, y probablemente la Mina o Coracha y sus baluartes. Posteriores incorporaciones, como las caballerizas en 1848, y las numerosas reformas y reparaciones llevadas a cabo desde principios del siglo XX, han contribuido a la complejidad del conjunto, tal y como hoy lo conocemos.


Descripción arquitectónica
Se considera uno de los castillos más representativos de la vida del Temple y uno de los modelos de la arquitectura militar de más hermosa silueta. Consta de un gran recinto poligonal con dobles y triples defensas formando barbacanas, torres, estancias y un gran patio bajo o albacar.

La fortaleza tiene doble línea de murallas con diversas torres como Cabrera, Malvecino y Malpica. A éstas, se accede cruzando un foso por un puente levadizo. El espacio que lo separa de la última línea defensiva fue rellenado con escombros, creando un pasillo que sirve de mirador. También se encuentra protegida por almenas.

El palacio o casa grande tiene carácter de residencia. Sus muros son menos gruesos y dispone de más puertas y ventanas que el resto de las construcciones del Castillo. Constaba de varias dependencias como la sala rica, un mirador con azulejos, la sala de armas, una capilla, una bodega, las caballerizas, el salón, las celdas y los patios. Se encuentra bastante conservada.

La torre del homenaje se levanta altiva en la parte izquierda del patio de armas y tiene varias entradas. Cuenta con un puente levadizo. Tiene planta cuadrada y alcanza una altura de 24 metros. Conserva una preciosa inscripción en latín.

Se accede por el sur por una rampa que cruza el foso. La hermosa puerta principal está flanqueada por dos torreones unidos por un arco doble de medio punto y rematados con finas almenas. De ahí, se pasa al patio de armas donde, en su día, estuvieron las habitaciones de estos soldados-monjes.

Es interesante caminar por su interior, donde podemos ver un pozo que se usaba como aljibe para recoger el agua de la lluvia.


CIRCUITO:

RONDA BAJA

La Ronda Baja, se construyó en el siglo XV al pie de las murallas más antiguas del castillo. Recorriéndola, se pueden reconocer los muros de la cerca construidos en la época de los Templarios. Termina en el Cubo Nuevo del Castillo Viejo, cuya sala inferior es preciso atravesar para llegar a las rondas bajas del frente del río Sil.

                LAS TRES PUERTAS DEL RECINTO

La Ronda Baja se construyó en el siglo XV al pie de las murallas más antiguas del castillo. Recorriéndola se pueden reconocer estos muros de la cerca construidos en la época de los Templarios con bolos o cantos rodados del río y argamasa de cal. También pueden observarse como se adosaron las torres del siglo XV, en este caso de la Torre de los Caracoles, cuyo aparejo contrasta con el arruinado muro del siglo XIII.

A lo largo de la ronda se puede apreciar cómo este muro primitivo fue relevantazo o reformado en muy diversas épocas.


Puerta del siglo XIV eliminada por el Conde de Lemos
Primer puente levadizo construido por el Conde de Lemos (1467)
Puente levadizo construido por el Conde de Lemos que sustituye al primero en 1480

LA ARTILLERÍA

Todo el castillo presenta huecos de tiro de diversas formas: para flechas, llamados saeteras y para pequeños cañones, llamados torneras a causa del ruido (trueno) de disparo. Cada tipo de abertura corresponde a una etapa constructiva distinta, y los diferentes tamaños de las bocas circulares de las troneras indican el calibre de las piezas de artillería que por ellas asomaban.
En los castillos, como en los galeones, las troneras se disponían por distintas líneas de fuego. 

Durante las excavaciones del castillo han aparecido tres cañones del siglo XV que se exponen en el Museo del Bierzo.

                TORRE DE CABRERA

Fue construida por el Conde de Lemos a mediados del siglo XV, y se llama así por estar orientada hacia la Sierra de Cabrera, territorio que también pertenecía al Conde. Es una torre encabalgada sobre distintas rondas. Arranca fuera del castillo, en línea con la barbacana que se le adosó posteriormente, monta sobre la ronda baja, cuyo recorrido pasaba por una bóveda bajo ella, y llega hasta la ronda alta, desde la que se accede a sus pisos superiores.

                RECRECIDO DE LA RONDA

La muralla de la ronda baja fue recrecida varias veces, seguramente como respuesta defensiva a los asaltos sufridos en el siglo XV. En este tramo se han dejado vistos los niveles de suelo de dos momentos distintos del tiempo en que el castillo perteneció al primer Conde de Lemos, Pedro Álvarez Osorio (1440-1483), y sufrió el ataque de los irmandiños gallegos (1467). A cada nivel de suelo corresponden distintas gárgolas de evacuación de agua y diferentes aberturas de tiro para flechas y artillería.


                TRANSFORMACIÓN DE LA RONDA

Inicialmente solo existía el muro de la época templaria. En el siglo XV se construyó la ronda baja, se añadieron las torres que engarzan en ella y, poco después, otros edificios medievales. En el siglo XIX las casas que se adosaron a la muralla destruyeron el talud e hicieron sótano a sus pies, de forma que en la restauración reciente hubo que recalzar la muralla antes de recuperar el talud original. En toda la evolución desde el siglo XIII se han producido por tanto numerosas construcciones que pueden apreciarse desde exterior.

                TORRE DE MALVECINO

La Torre de Malvecino recibe este nombre ya en los documentos del siglo XV. Se trata de una torre “albarrana”, es decir, separada de la muralla principal pero unida a ésta por una pasarela. Sin embargo, está engarzada con la ronda baja desde la que se accede a sus dos niveles de cámaras de tiro para artillería. Fue construida por el Conde de Lemos, Pedro Álvarez Osorio, en la segunda fase de sus obras en torno a 1467.
Torre de Malvecino

TORRE DE MALPICA

La Torre de Malpica recibe este nombre ya en los documentos del siglo XV. Al igual que la de Malvecino, es una torre albarrana unida a la muralla por una pasarela, pero engarzada en la ronda baja, desde la que se accede a sus dos niveles con cámaras de tiro para artillería. La construcción se debe al Conde Pedro Álvarez Osorio en su primera etapa (antes de 1467). Por su planta rectangular y sus singulares cámaras de tiro recuerda a la torre coetánea de Cabrera y a las obras del Conde de los castillos de Castro Candelas en Galicia, y de Cornatel aquí en el Bierzo.
Torre de Malpica

LECTURA DE PARAMENTOS

En esta parte de los muros es donde mejor se observan las distintas fases constructivas, y aunque el estado de ruina del conjunto ha obligado a realizar una intensa restauración, se ha procurado que se puedan seguir reconociendo las diferentes etapas.

Los muros más primitivos se construyeron con cantos (o bolos) y barro forrados exteriormente por un muro de cal y canto. Este muro, formado por dos capas, fue roto por el Conde de Lemos para abrir una puerta y adosarle una escalera. Más tarde, cuando los Reyes Católicos construyen su torre, cortan la escalera para facilitar el disparo desde tronera. Esa torre apoya al tiempo sobre ambas capas del muro primitivo, y al tener más resistencia una que otra provocó la grieta que se aprecia.
Muro con distintas fases
Los muros más antiguos podrían corresponder a la primera fortificación de finales del siglo XII, y se observan sólo en la parte inferior de la cara interna de la muralla porque por el exterior fueron completamente tapados por el muro de cal y canto que se les adosó. En la abertura que la restauración ha dejado se aprecia el adosamiento de uno y otro. Sin embargo, parte de esta muralla primitiva, en la que engarzan los muros de las dependencias más antiguas del castillo, se fue cayendo hasta dejar colgadas o sin apoyo las fábricas posteriores, obligando a la restauración de 1999 a completar las faltas para evitar el hundimiento de toda la estructura.
Muro del Conde de Lemos
 CASTILLO VIEJO
El Castillo Viejo lo construyó Pedro Fernández de Castro hacia 1343. Aprovecha un extremo de la cerca primitiva y servía para defensa del nuevo señor, separándolo del resto de los vecinos de la primitiva Ponferrada, que mantuvieron sus casas en forma de pallozas circulares al exterior de este castillo. Por este motivo se llama Castillo Viejo ya que cuando se construyó, el resto del actual castillo, luego llamado Castillo Nuevo, era simplemente una muralla urbana en cuyo interior se habían asentado los primeros ponferradinos.
Castillo Viejo
                TORRE DEL HOMENAJE VIEJO
La Torre del Homenaje del castillo de Pedro Fernández de Castro, tiene un solo acceso, elevado e inaccesible hoy, en cuyo dintel todavía puede reconocerse su escudo. El nivel inferior estaba cubierto por una bóveda de la que aun se conservan los arranques. Al construirse a mediados del siglo XV el Cubo Nuevo, al que también se llamó Homenaje, esta torre, hasta ese momento la más alta del recinto, pasó a llamarse Homenaje Viejo. A finales del siglo XV se le adosó una torre construida por los Reyes Católicos.
Torre del Homenaje Viejo
               CUBOS VIEJO Y NUEVO
El Cubo Viejo es una torre construida hacia 1343, al mismo tiempo que el Homenaje Viejo y el muro que las une. También se llamó Cubo del Duque, seguramente porque la torre y las salas anexas ya desparecidas fueron reformadas por el Duque de Arjona (1400-1430).
Cubo Viejo
A mediados del siglo XV Pedro Álvarez Osorio hizo levantar el Cubo Nuevo para que sirviera de Homenaje. Entre ambos cubos existió un edifico con tres plantas y un corredor o galería de madera delante de su fachada.
Delante del corredor aún se conserva el brocal de un pozo que nunca tuvo mucha agua.         
RONDA DEL SIL

                MURALLA TEMPLARIA Y LA DEL CONDE DE LEMOS
Inicialmente en esta ronda se levantó una muralla de cantos y barro a la que se adosó un forro exterior también de cal y cantos. Sin embargo, cuando en el siglo XV el Conde de Lemos decidió reforzar esta ronda optó por construir un muro de menor calidad un poco más debajo de la ladera y rellenar el espacio entre ambas murallas.

Con el abandono del castillo éste se rellenan de escombros que llegaron a cubrir casi por completo la muralla del Conde, se picó la base de apoyo para adaptar un camino  y se chapó por delante.

Las obras actuales han recuperado los niveles históricos y el perfil exterior de la ronda  recalzando los cimientos.
Muralla Templaria
                LA RONDA DEL SIL
Antes de que el castillo se terraplenara por completo para ubicar un campo de fútbol a principios del siglo XX, hubo un momento, en el inicio del siglo XIX, en que, el castillo estaba parcialmente arruinado, se construyeron algunas dependencias de muy mala calidad y se igualo el nivel de uso.

En la restauración se mantuvo el último nivel en la zona más pegada a la muralla, manteniendo el nivel del siglo XIX en las zonas donde aún no se ha profundizado la excavación arqueológica.
La Ronda del Sil
               LA CORACHA   
Como el pozo del Castillo Viejo no siempre tenía el agua suficiente, a finales del siglo XV se tomó la decisión de construir una galería subterránea que bajase hasta el río. Este tipo de galería se llama coracha o mina, que es el nombre con el que fue conocida Ponferrada. El agua se supla mediante un juego de poleas desde el pozo inferior, donde estaba un sirviente, que era realmente el único que sufría las empinadas escaleras de la mina. Para proteger la mina se construyeron dos torres o baluartes, ambas muy desmochadas en la actualidad.
Coracha
DEPENDENCIAS JUNTO A LA MINA
En la documentación del siglo XVI se habla de una torre en ruinas por donde se baja a la mina, ya que finalmente se cae. En esta zona se buceen por tanto diversas reparaciones y reformas que en principio pueden dividirse en dos tipos de restos. Por un lado estarían las dependencias domésticas de los siglos XV y XVI como la gran casa con bancos cuyo arranque se conserva, y por otro lado están los muros añadidos de los siglos XIX y XX que cerraron completamente la ronda.

                ATARJEAS
Los textos de los maestros de obras del siglo XVI insisten en la necesidad que tiene el castillo de pavimentar las rondas y mantener abiertas y en uso las atarjeas o salidas de agua, evitando que ésta se acumule y socave los cimientos de la fortaleza.
Atarjeas
RONDA ALTA

La Ronda Alta coincide básicamente con la coronación del muro templario y permite comunicar entre sí todos los edificios que en los siglos XIV y XV se fueron añadiendo al recinto primitivo: las torres de Monclín, Caracoles y Cabrera, los palacios nuevo y viejo y las torres de Malvecino y Malpica. Es posible que hasta finales del siglo XV desde esta ronda se accediese al Castillo Viejo, pero la torre de los Reyes Católicos cortó definitivamente este paso en los albores del siglo XVI.

               TORRE DE LOS CARACOLES
La Torre de los Caracoles fue construida por el Conde de Lemos en la primera etapa de obras (1440-1467). Sin embargo en su interior aparece el escudo de su cuñado, el Duque de Arjona, muerto en 1430. Esto se hizo con una intención engañosa: sabemos que el Conde de Lemos hizo otras inscripciones con fechas falsas e incluso colocó el escudo de su primera propietaria, después de morir ésta.
Torre de los Caracoles
La intención del Conde, que retenía el castillo tras la muerte de Beatriz, era evitar que los hijos de su segundo matrimonio pudieran reclamar el castillo como herencia de su padre.
Escudo del Conde de Arjona
               TORRE DE CABRERA (abierta por la Gola)
La Torre de Cabrera, al igual que las de caracoles y Monclín, estaba abierta por la gola, es decir, sin cerrar hacia el interior de la fortaleza para que no pudiera ser utilizada para dominarla. Cuando se construyó entre 1440 y 1467 por el Conde de Lemos, el Palacio no estaba levantado aún, y en el Cubo Viejo del Castillo Viejo se abrió una tronera para emplazar una pieza de artillería que dirigía su fuego hacia la torre abierta de Cabrera.

                PALACIO NUEVO (Centro de Congresos)
Patio Palacial: Las dependencias más lujosas de la zona palacial se organizan en torno a un patio con galerías porticadas de madera. La parte central se pudo albergar un gran parterre de flores y otras planteas, y ésta ligeramente elevado sobre el nivel del suelo de los corredores perimetrales.

Estos corredores y las galerías superiores permiten la comunicación entre las salas más emblemáticas de la fortaleza: la sala de armas (ahora salón de actos) la sala rica en el piso superior (completamente desaparecida) y la sala pobre (llamada así por ser menos rica que la otra pero que conserva los arranques de una bella chimenea), en la planta baja.

                ADARVE DE LA PRIMERA RONDA ALTA
Cuando en el siglo XV se levantó la muralla del siglo XIII, hubo necesidad de ampliar el adarve o camino de ronda. Ello se hizo con unas vigas de madera que salían del muro y cuyos mechinales aún pueden verse. Las murallas más antiguas no necesitaban un adarve muy ancho, pero en el siglo XV las almenas empezando ser más gruesas para utilizarla en la artillería, y era necesario colocar pequeños cañones en el adarve, por lo que el grosor de la muralla resultaba insuficiente. Con las últimas obras del siglo XV se aumentó enormemente el grosor del adarve, por lo que el grosor de la muralla resultaba insuficiente.
Adarve de la Muralla
              PALACIO VIEJO
El Palacio Viejo estaba formado por un cuerpo de habitaciones entre dos torreones y albergaba las habitaciones privadas del conde de Lemos. De entre todas las estancias del palacio, las más famosas fueron sin duda las Salas y el Mirador de los Azulejos que ahora alojan la biblioteca.
Mirador de los Azulejos
Las conocemos tanto por las crónicas de la época, que alababan su belleza, como por los restos de azulejos encontrados en las excavaciones. Estos paños de azulejos, que se disponían en suelo y zócalos, están formados por dos tipos de piezas: los alfardones poligonales con decoración vegetal, y las piezas cuadradas con los escudos de Pedro Álvarez d Osorio y Beatriz de Castro.

Fueron fabricadas en Valencia, posiblemente en el mismo taller que hizo la sala de papa Alejandro VI en Roma, y ahora se exponen en una sala del Palacio Viejo.
Palacio Viejo
                TORRES ALBARRADAS
Esta torre de Malvecino y las torres de Cabrera y Malpica que se ven desde ella son realmente torres albarranas, es decir, separadas de la muralla principal y unidas a ella por puentes de madera o arcos de piedra.

Las tres permiten que bajo ellas continúe la ronda baja, pero si el enemigo tomaba esta ronda, la defensa del castillo seguía conservando el acceso y el dominio de estas torres desde la ronda alta. Para ello, las puertas que comunicaban con la ronda baja pueden cerrarse desde dentro de las torres. Existía una escalera que comunicaba los distintos niveles con una terraza superior. 


RONDA ALTA Y CASTILLO VIEJO
Al final de la Edad Media el castillo había llegado a tener una gran complejidad. Engarzados a la ronda alta había multitud de torres y edificios, con sus tejados, sus galerías, su personalidad y nombre propios, caso muy singular entre los castillos españoles.

La ronda alta permitía comunicar todos estos edificios entre sí, pero no tenía continuidad en el Castillo Viejo que de esta forma se convertía en el último reducto de defensa. Es posible que hasta finales del siglo XV desde esta ronda se accediese al Castillo Viejo en la parte en la que nos encontramos, pero la torre de los Reyes Católicos cortó definitivamente este paso en los albores del siglo XVI.

Vista Muralla Exterior y baja, Torre Cabrera y Palacio Viejo
DE LA TORRE DE LOS REYES CATÓLICOS AL CUBO NUEVO
En el siglo XV al Castillo Viejo se le añadieron dos torres. La primera fue el Cubo Nuevo o Torre del Homenaje Nuevo, construida por Pedro Álvarez Osorio a partir de 1467, y en la que figura el escudo de este Conde junto con el de su primera mujer Beatriz de Castro.

En los últimos años del siglo XVI, los Reyes Católicos mandaron hacer la torre que hoy lleva su nombre y en la que aparece su escudo con las armas de Castilla y León, y de la corona de Aragón con Sicilia junto con el yugo y las flechas, divisas de estos monarcas. Bajo ellos aparece el escudo de las torres, por se Juan de Torres el alcalde real de esa época.
De la Torre de los Católicos a Cubo Nuevo
PALACIO NUEVO
Dependencias del Palacio Nuevo: las excavaciones realizadas a partir de 1996 sacaron a la luz los restos de los muros de todas las dependencias de la zona palacial que habían sido arrasadas a principios del siglo XX cuando se derribó y explanó el edificio con la intención de convertirlo en un campo de fútbol.

La parte más dañada fue la crujía de la fachada del Palacio Nuevo, que tenía funciones representativas más que residenciales. Aún así, algunas de estas salas, que conservaban partes significativas de sus muros, pueden identificarse con las salas descritas en la documentación histórica, como el zaguán, la antebodega o la sala pobre.

Bodega o Capilla y Sala de Armas: Los documentos del siglo XVI llaman “bodega” a esta estancia, conservada casi íntegramente bajo los escombros, aunque por su altura y proporciones podría haber tenido otro uso cuando la construyó el Conde de Lemos en la segunda mitad del siglo XV.

Así, se conservan los arranques de dos machones laterales que podrían corresponder a los restos de un arco sin función estructural, pero que recuerda a los arcos que separan el presbiterio y el altar de la capilla.

La sala del piso superior, cuyo forjado de madera había desaparecido pero cuyos muros de tapial aún asomaban, está perfectamente identificada como la Sala de Armas. Estaba muy decorada con estucos y pinturas y albergaba la armería del Conde.